jueves, 18 de noviembre de 2010

¿Se puede aprender a vivir?

   Esta pregunta me hace pensar en momentos en los que me he arrepentido de algo, pero a la vez me siento orgulloso de haberlos vivido, ya que de los errores se aprende. Pero, ¿se puede aprender a vivir?¿es posible evitar esos errores aprendiendo a vivir?
   
   El no tener el don de ver el futuro, no nos hace poder evitar los fallos que tendremos que afrontar, y que como seres humanos que somos, vivimos constantemente con esos errores, que aprendemos a no volver a cometerlos si primero pasamos por ellos.
   
   Aprender es conocer, conocer es saber de una forma mejor o peor a que nos estamos refiriendo, si yo desconozco aquello que me va a suceder, me es imposible aprender a vivir.

   Ahora argumentaré a favor de que si desconocemos lo que nos ocurrirá en un futuro, será imposible que podamos aprender a vivir.

   El ejemplo que voy a proponer puede explicar, en cierto modo, mi tesis:

   Un hombre rico, con una mansión, un coche de lujo y con una empresa en el auge de su existencia, de repente se ve en la ruina, y este hombre se queda sin nada. Él sabía vivir con dinero, porque gozó de años con su riqueza, pero ahora que está en la calle está atemorizado y sin saber qué hacer, dónde ir ni a quién acudir. Podrá aprender a vivir, cuando se relacione con el entorno y la situación, tendrá una dimensión cognoscitiva del lugar, es decir, habrá aprendido a vivir en la situación que se le ha presentado.

   Queremos aprender a anticiparnos a los errores que cometeremos, para así no equivocarnos y ser perfectos, pero el hecho de no poder hacerlo, nos hace reflexionar que hay cosas que son  incognoscibles para la mente humana.

   No se puede aprender a vivir, ya que no existe el manual de la vida que nos guíe paso a paso cómo llevar nuestra vida, el único modo del que podemos "aprender a vivir" es mediante las experiencias cosechadas por los errores cometidos.
   
   En conclusión, la vida no se puede estudiar para poder llevarla como cada uno desee, sino que del producto de los errores que cometamos, aprenderemos a vivir, hasta un nuevo error, el cual mejorará nuestro aprendizaje de la vida.